Her

Her

Por Erik Martínez


Her (2013). Dir. Spike Jonze.
Sencillamente alucinante. Las visualizaciones de un mundo futurista en donde el hombre es esclavizado por las maquinas se han visto desde siempre en las historias del cine.
Y no sólo hablar de una esclavización en donde la maquina es un emperador del mundo como en Terminator, sino el sólo hecho de no poder vivir sin el teléfono móvil. Basta con mencionar algunos ejemplos como Black Mirror, la reciente serie de Netflix, para externar una parte de cómo las sociedades comenzamos a ser presos de la tecnología.
En medio de todo este apogeo surge “Her” (2013) película dirigida por Spike Jonze. Con una de las historias de amor y desilusión que sin duda se cimienta como una de las mejores de la década. Donde su premisa básica muestra el enamoramiento de un hombre con una inteligencia artificial.
Theodore Twombly (Joaquín Phoenix) es escritor de cartas para terceros en una empresa dedicada a ello, él es el protagonista. La tecnología ha dado un salto enorme en la que su trabajo lo hace dictando a una computadora que sigue sus órdenes. Un particular día, un nuevo sistema operativo está disponible y Theodore decide instalarlo.
El nuevo sistema atendido por una voz, Samantha (Scarlett Johansson), es una inteligencia artificial (IA) programada para aprender de su dueño, charlar con él y estar a sus servicios. Con el paso del tiempo no sólo se convierte en una asistente para el protagonista, sino que desarrollan una química, se enamoran.
Cabe destacar que, en las actuaciones, Scarlett Johansson nunca salió a pantalla, su voz fue la que contuvo el histrionismo y las expresiones que interactuaron con Joaquín Phoenix, hecho que le causó nominaciones a varios premios como mejor actriz.
El filme no sólo se concibió entre los favoritos de la crítica por su actuaciones emotivas y contenido, sino por la estética que manejó. Principalmente el color, que destacaba al personaje de la monotonía de los ambientes grises que lo rodeaban para convertirlo a él, a través de su camisa, en el objeto principal de la composición, así mismo, su vestimenta apoyaba a remarcar su estado de ánimo.
Otro de los aspectos que llevó a este filme a hacerse acreedor de un Premio Oscar fue su banda sonora repleta de canciones que destacaban la emotividad de las escenas y que llegan a su cúspide con “The Moon Song” interpretada por Karen O, misma que le dio la nominación de la Academia a Mejor Canción Original.
El guion de esta película resulta inquietante en muchos aspectos y da la posibilidad de un amplio desglose, razones por lo que en los Oscar del 2014 se llevó el premio a Mejor Guion Original. Un sencillo planteamiento, ¿se puede enamorar una inteligencia artificial?
Suponiendo que esté programada para aprender, su algoritmo, a través de una biblioteca enorme como es el internet, dejará a su disposición los comportamientos humanos y sus reacciones ante impulsos sentimentales. Creará una personalidad única conforme a lo aprendido y solicitado en medio de las disposiciones “socialmente aceptables” y “políticamente correctas”.
¿Acaso no es lo mismo que hacemos los humanos? Aprendemos desde niños las emociones con lo que el mundo nos da, con lo que nuestros padres nos ofrecen. Se inculcan los limitantes sociales, los sentimientos los asociamos a experiencias grabadas en el subconsciente acompañadas de descargas químicas. La IA hace lo mismo, pero con una base de datos y secuencias binarias.
En medio de estas dudas del existencialismo, se desdobla un magnifico film que atañe varios aspectos sociales, desde el cómo ven los demás las relaciones no convencionales, hasta la tristeza por las rupturas amorosas y el encuentro de la realidad de las mismas, lo que hay cuando a las hojuelas se le acaba la miel.
Her, una de las mejores películas que dio el 2013, conmovedora, catártica, con una profundidad en su diálogo y abierta a diferentes lecturas. Un largometraje que tiene un dejo de cuestionamientos y un aire a lo que pudiera ser el futuro.

EN AÑADIDURA
El ver este filme me remontó a lectura de “Yo, Robot” (1950) del escritor Isaac Asimov, uno de los más prolíficos en la ciencia ficción y creador de las leyes de la robótica, que en su tiempo se hacía los mismos cuestionamientos de las máquinas, su inteligencia y la relación con los humanos. Así mismo a otras de sus obras adaptadas al cine, “El hombre bicentenario”.

¿Qué nos hace seres humanos?

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